El asalto ocurrió en una gasolinera de la Florida.
Mientras el hombre intentaba intimidar a la empleada, incluso, disparando dentro de la tienda, ella permanecía calmada, sin signos de sentirse amedrentada.
El hombre logró salir con efectivo en mano resultado del asalto perpetrado en una estación de gasolina Shell en la Lithia Pinecrest Roaden en Valrico.
Al final la mujer le advierte que "no iba a llegar muy lejos" y tan pronto el asaltante sale, agarra el teléfono y llama a la policía.