Natalia Jiménez presentó una moción de emergencia ante la Corte de Familia de Miami solicitando que su exesposo, Daniel Trueba, se someta a una prueba de drogas. La cantante española expresó su preocupación por el bienestar de su hija Alessandra, de ocho años, al considerar que el productor musical no se encuentra en condiciones adecuadas para ejercer su custodia. Según documentos judiciales, Trueba habría mostrado comportamientos "extraños", motivo que impulsó la acción legal.
El juez del caso ordenó que Trueba se someta a una prueba toxicológica de 12 paneles, que deberá realizarse en un plazo no mayor a siete días desde la emisión del fallo, el pasado 31 de julio. La prueba será gestionada por los Servicios del Tribunal de Familia y el costo correrá por cuenta de Jiménez, sin afectar futuros procesos legales. Esta nueva etapa del conflicto se suma a una disputa por la custodia exclusiva que ha enfrentado a ambos desde hace más de tres años.
El historial legal entre Jiménez y Trueba ha estado marcado por señalamientos de inestabilidad emocional, acusaciones de abuso de sustancias y restricciones de viaje impuestas por el padre. Actualmente, la intérprete de Creo en mí mantiene la custodia de su hija, mientras continúa su lucha por garantizar un entorno seguro y estable para la menor.