Ruth Hamilton, residente de la ciudad de Golden, Columbia Británica, al sur de Canadá, fue sorprendida mientras dormía, por un meteorito que atravesó el techo de su casa y cayó en su almohada, a pocos centímetros de su cabeza.
Dijo a la prensa local: "Estaba asustada y temblando cuando ocurrió (...) Fue casi un alivio cuando nos dimos cuenta de que solo podía haber caído del cielo"
La mujer asegura que este suceso le cambió su vida y agregó: "Quizás tiene miles de millones de años".
"La vida es preciosa y puede desaparecer en cualquier momento, incluso cuando crees que estás a salvo y seguro en tu cama" dijo Ruth, quien se encuentra ilesa; además piensa conservar la roca como recuerdo de este suceso.