El padre de Britney Spears, Jamie Spears, aceptó renunciar a la tutela de su hija.
El giro de los acontecimientos es una gran victoria para la estrella del pop internacional, que ha estado bajo tutela durante 13 años, desde que Spears colocó a su famosa hija bajo el arreglo ordenado por la corte en 2008 cuando sufrió un colapso muy público.
Pero, en los 13 años transcurridos desde entonces, Spears ha estado lo suficientemente en forma para actuar, hacer giras, realizar una residencia en Las Vegas y ganar cientos de millones de dólares.
Hablando más que nunca, Spears ha estado instando al juez a sacar a su padre de su tutela a través de una serie de testimonios abrasadores este verano, incluso diciéndole al tribunal que quiere "presentar cargos" contra su padre por "abuso de tutela". y afirmando que lo quiere en la cárcel.
Este jueves, el padre de Spears presentó ante el Tribunal Superior de Los Ángeles su respuesta a la petición de la cantante de suspensión, anunciando su decisión de renunciar. Sin embargo, su abogado afirma que "no hay motivos reales para suspenderlo o removerlo", y cita la "batalla pública con su hija" como su razonamiento para renunciar.